¡Quién lo diría! Casi han pasado 25 años desde que dejamos las aulas de nuestro querido Colegio Claretiano.
Corría el año 1986, momentos muy difíciles para el Pérú en la época de la violencia terrorista que cegó la vida de miles de peruanos inocentes.
Corría el año 1986, momentos muy difíciles para el Pérú en la época de la violencia terrorista que cegó la vida de miles de peruanos inocentes.
Muchos compañeros empezaron a estudiar en las aulas claretianas desde el primer grado de primaria y otros -acaso la mayoría- se fueron incorporando posteriormente, en tanto otros pocos se fueron quedando en el camino.
Nos queda el sabor de los años que vivimos, anécdotas, vivencias, alegrías y tristezas, la disciplina claretiana, el trabajo intelectual de aprender día a día... en suma la imagen de nuestra existencia.
No es casual que al recordar nos embarguen muchas emociones encontradas: alegría y felicidad, matizada con la nostalgia de aquellos días que se quedaron para siempre en nuestro corazón, como una huella indeleble; tristeza por aquellos compañeros que murieron físicamente -como Franco Salini Falconí, Feddy Reyes Moreno o Juani Gálvez Arana (primo de César Gávez Wilson, "Juani" era de la promo 85 pero siempre compartió con nosotros como un hermano sincero y bueno), compañeros que nos miran desde el cielo y que están presentes en el recuerdo nuestro, en el de sus familias y en el de sus viudas e hijos... a ellos también va nuestro homenaje in memoriam.
También el reconocimiento para nuestras madres y nuestros padres, sin cuyo esfuerzo y aliento no hubiera sido posible estudiar en el Claretiano. Y desde aquí nuestras plegarias para aquellos que están postrados por alguna enfermedad, como el compañero Lenin Burgos, de quien estamos seguros se recuperará plenamente.
Los años pasan, y como dijo un poeta: "Nosotros los de entonces, ya no somos los mismos". Pero, un momento: ¡Somos los mismos! Solamente hemos cambiado de apariencia: estamos más canosos, más gordos o más flacos, pero el corazón es el mismo de siempre.
Dios mediante, el año 2011 celebraremos nuestras Bodas de Plata de la Promoción "Hermano Juan Diego Píriz Masías", nombre de un modesto pero muy bueno y sabio hermano carpintero, que dejó su España natal para venir a trabajar al Perú con la congregación de padres claretianos. Que Dios lo tenga en su gloria, y que también desde el cielo interceda por nosotros, para ser mejores.
Especialmente un recuerdo y una mención especial a nuestros maestros y profesores, a los sacerdotes claretianos, al personal administrativo y de servicio. Ya volveremos sobre este tema, precisando nombres y anécdotas...
Especialmente un recuerdo y una mención especial a nuestros maestros y profesores, a los sacerdotes claretianos, al personal administrativo y de servicio. Ya volveremos sobre este tema, precisando nombres y anécdotas...
